El relleno de este dulce suele ser cremas de queso como el mascarpone o natas escurridas. Aquí, intento probar algo nuevo totalmente: emplear el chocolate como relleno.
Francamente, el resultado era muy bueno a nivel de sabores. He usado una lata de choco intenso que guarde el sabor habitual del chocolate y no tiene que ver con la nutella.
Ingredientes
375 gr de mozzarella fresca – 3 bolas
125 gr de sémola de trigo
50 gr de azúcar
1 cuchara de agua de azahar
250 ml de agua
20 gr de pistachos crudos molidos
100 ml de almíbar
250 gr de choco intenso
Manera de Preparación
Cortar las bolas de mozzarella en trozos pequeños.
En una cacerola, calentar la cantidad de agua y añadir el azúcar y la sémola y mezclar bien y seguir cocinando unos minutos sin hervirse, retirarlo del fuego y dejarlo aparte.
En otra cacerola, calentar los trozos de mozzarella hasta que se constituyan una masa disuelta, en este momento, añadir agua azahar y la sémola cocida y remover bien para formar una masa compacta tierna.
Retirar del fuego.
Sobre una superficie antiadherente untada con almíbar, verter la masa y extenderla hasta que forme una película de medio centímetro de grosor.
Dejarla enfriar a temperatura ambiente durante 2 horas.
Ahora, cortar la masa en rectangulares.
Poner la crema de chocolate en cada rectangular y enrollarlo para formar un rollo, luego, cortar el rollo en unos trozos al gusto personal.
Espolvorear el pistacho encima de los trozos rellenos y echar un poco de almíbar.
Servir frío.
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